¿Es Tesla una burbuja a punto de estallar?
El Robotaxi y su Valoración.
Tiempo de lectura: 15-20 minutos.
RESUMEN
Entenderás el funcionamiento del software Full Self-Driving (FSD) y su papel en la conducción autónoma.
Descubrirás los retos tecnológicos y de producción que Tesla enfrenta para hacer realidad esta visión.
Conocerás las diferencias clave entre Tesla y sus competidores, como Waymo, en el desarrollo de vehículos autónomos.
Explorarás cómo los Robotaxis podrían transformar la economía y cambiar nuestra relación con la propiedad de vehículos.
Descubrirás cuánto vale la línea de negocio del Cybercab y analizaremos si Tesla está sobrevalorada o representa una oportunidad de inversión.
¡Muy buenas a todos!
Mi nombre es Sualem Betancor, soy uno de los tres fundadores de WorldStocks Investments. Hoy quiero profundizar en la tecnología que ha impulsado a Tesla a despegar como un cohete y analizar si el mercado ha exagerado al valorar el Robotaxi.
Antes de que leas el artículo, me encantaría conocer tu opinión sobre lo siguiente:
Si quieres saber más, te recomiendo que te quedes hasta el final del artículo.
⚠️ IMPORTANTE ⚠️
Los formatos del artículo (PDF, audio y el Excel con la valoración) están al final, junto con una bibliografía para que puedas profundizar por tu cuenta.
Artículo Escrito:
Imagina un futuro en el que no necesitas conducir. Un futuro donde los coches se desplazan solos, las ciudades se transforman y surge una nueva economía en torno a ellos. Eso es lo que Tesla está planteando con su visión de los robotaxis.
Lo interesante es que el mercado parece estar adelantándose a esta promesa.
La acción de Tesla, que antes reflejaba únicamente su negocio de coches eléctricos, ahora incluye las expectativas de una revolución en la movilidad liderada por los robotaxis.
Además, con Elon Musk como asesor del gobierno de EE. UU., muchos piensan que las barreras regulatorias podrían desaparecer más rápido de lo esperado.
Pero la realidad es más compleja. Tesla no solo enfrenta retos legales; también debe superar enormes desafíos tecnológicos, de producción y de seguridad para hacer que esta visión sea viable en 2030.
¿Realmente la conducción autónoma de Tesla justifica su valoración?
Antes de responder a esta pregunta, es fundamental entender bien qué es lo que estamos valorando.
Por eso esto es lo que te vas a encontrar en el artículo de hoy:
Por eso, debemos comenzar con la base de todo el negocio de Tesla: el software.
¿Qué es y cómo funciona el FSD?
El Full Self-Driving (FSD) de Tesla es un software de asistencia a la conducción diseñado para que, en el futuro, los vehículos puedan conducirse completamente solos.
Basado en Tesla Vision, utiliza exclusivamente cámaras y redes neuronales para generar un mapa tridimensional del entorno, identificando coches, peatones, señales y otros elementos clave en la carretera.
Gracias a su tecnología de aprendizaje continuo y actualizaciones periódicas, el FSD combina precisión, adaptabilidad y velocidad de procesamiento.
¿Cómo consiguen que sea seguro que el coche conduzca por sí solo?
Como he mencionado, este sistema prescinde de radares y LiDaR para centrarse únicamente en lo que capturan sus cámaras.
Con ocho ojos electrónicos distribuidos por todo el vehículo y redes neuronales avanzadas que procesan la información, el coche es capaz de comprender su entorno y tomar decisiones en tiempo real.

Elon Musk suele describir a sus coches como “animales sintéticos”, una metáfora que ilustra a la perfección cómo funciona el FSD.
Las cámaras son los ojos y las redes neuronales, el cerebro. Gracias a esta tecnología, el sistema no solo ve, sino que “recuerda”.
Por ejemplo, si un camión bloquea la vista de un semáforo, el coche sabe cuál era la última posición visible y actúa en consecuencia, evitando errores que podrían ser peligrosos.

Todo esto sería inútil si la velocidad de procesamiento no fuera lo suficientemente rápida para comprender lo que ocurre a su alrededor, y este es otro punto fuerte del FSD.
Cada 28 milisegundos, el sistema actualiza su percepción del entorno, manteniendo al coche perfectamente sincronizado con la realidad.
Incluso en situaciones complejas, como un peatón que cruza de repente o un coche que aparece en el ángulo muerto, el FSD sabe cómo reaccionar.
Además, Tesla ha incorporado un sistema de respaldo: dos módulos de computación trabajan en paralelo, uno encargado de tomar las decisiones principales y el otro comprobando su coherencia.
Esto no solo aumenta la fiabilidad, sino que permite probar nuevas versiones del software en un “modo sombra”, donde se ensayan mejoras sin afectar la conducción.
Las redes neuronales que permiten este nivel de precisión utilizan una arquitectura conocida como Hydranets. En términos simples, es como si el sistema tuviera un cerebro central para interpretar lo general y varios mini-cerebros especializados en tareas concretas.
Este diseño modular permite actualizar cada componente de forma independiente, mejorando la flexibilidad y el rendimiento del sistema.
Una de las mayores ventajas de Tesla Vision es su capacidad para reconstruir el entorno en 3D directamente a partir de imágenes.
Esto elimina la necesidad de cálculos intermedios que emplean otros sistemas, haciendo que el FSD sea más preciso en escenarios complejos, como curvas cerradas o intersecciones concurridas.
Y no solo reacciona a lo que ve en el momento, también incorpora contexto temporal.
Esto significa que el sistema puede predecir cómo se moverán los objetos basándose en sus trayectorias pasadas, una capacidad crucial para gestionar situaciones complejas, como un peatón que aparece de repente detrás de un autobús.
Ahora que tenemos una comprensión clara de cómo funciona el FSD, es momento de analizar qué se necesita para mejorar este software. Aquí es donde realmente se encuentra la clave del futuro de esta empresa.